A tu lado, es la expresión idiomática de una relación de pareja, no existe el delante, detrás, debajo o encima (a menos que se refiera a posiciones sexuales), son dos personas que se miran de frente antes de darse un buen beso o para resolver cualquier circunstancia que se les presente, es sumar otra humanidad a un mundo que era individual, es tener cuatro manos en vez de dos, es poder reír al mismo compás y llorar escuchando los latidos de otro corazón que está fuera de tu cuerpo, pero que lo sientes propio.
Una persona adulta se une a otra persona igual de adulta para armar un nosotros, si alguno de los dos piensa que su deber es cargar al otro o ser cargado, está representando un rol paternal o de niño, de dependiente o codependiente, de verticalidad y no de horizontalidad. Hay preguntas importantes que debemos hacernos para reconocer si queremos estar en pareja o andamos buscando a alguien que ocupe el rol "equivocado" ¿Me siento estable emocionalmente? ¿Puedo cubrir mis gastos? ¿Tengo intención de pasar tiempo con otra persona? ¿Quiero compartir mi espacio físico con alguien? ¿Soy capaz de negociar y llegar a acuerdos? ¿Conozco mis valores? son cuestionamientos que marcarían un buen comienzo, y es importante recalcar que se trata de preguntas que se hacen los adultos.
Ser una persona que resuelve no implica toparse con uno que necesita que le resuelvan, es poder resonar con alguien que sepa resolver ecuaciones diferentes a las nuestras-y en esa unión-lograr soluciones más rápidas y asertivas.
¡Vamos! amos los dos.